Concordia / Denunciaron penalmente a seis oficiales de la Policía de Entre Ríos por abuso de autoridad y apremios ilegales

Este lunes sucedió un hecho que derivó en una denuncia penal contra la Policía de Entre Ríos. Seis oficiales fueron señalados por una mujer como autores de los delitos de apremios ilegales y abuso de autoridad en Concordia. El accionar irregular de los funcionarios policiales se desarrolló luego de un intercambio de palabras que hubo en un colectivo de la Línea 9 de la capital del citrus, consignó ANÁLISIS.

La mujer de 50 años discutía con el chofer porque el trabajador del transporte no le creía que ella era estudiante de un profesorado y la calificó de "estafadora" por pretender hacer valer su derecho de pagar como estudiante. Dos oficiales que iban en el colectivo, solicitaron que se pare el colectivo y llamaron a refuerzos por la situación y fue así como cuatro policías llegaron en una camioneta, armados con itacas y bajaron a la mujer del colectivo. Los oficiales le apretaron con fuerza los brazos y la tuvieron en vilo mostrando las armas que portaban. Ante la ausencia de delito, la dejaron sola en el medio de una avenida sin protección: "Quienes supuestamente están para cuidarnos, te bajan del transporte cuando vas a trabajar para divertirse un rato y dejarte a la deriva", señaló la hija de la denunciante.

Mientras la Policía de Entre Ríos está en la mira por los hechos ocurridos en el barrio Capibá, que están siendo investigados por la Justicia, una mujer de 50 años denunció penalmente a seis oficiales de la fuerza por haber cometido abuso de autoridad y apremios ilegales en Concordia. El hecho sucedió este lunes por la noche, cuando Rosi Castellano viajaba del profesorado donde se capacita a una escuela del barrio La Bianca, donde ejerce como docente.

Según relató la damnificada, todos los días debe discutir con el chofer de la Línea 9 que no cree en su condición de estudiante -está atravesando su tercera carrera terciaria- y la caracteriza como "estafadora" por pretender hacer valer su derecho de tarifa diferenciada. "Mi mamá se cansó de la vulneración cotidiana de este chofer y decidió sentarse cerca y contarle que lo que estaba haciendo era cercenar su derecho al boleto estudiantil, que ella no le mentía, que era estudiante y no una estafadora", señaló su hija en un escrito en Facebook.

"En todo caso, si de estafa se trataba ese rol le correspondía asumir a la empresa que cobraba 14 pesos un boleto para viajar paradxs, hacinadxs, en colectivos todos sucios, que se llueven y que encima cada vez que le pagas con 15 pesos te quedan debiendo uno. Ya se, son cuatro centavos de dólar, pero para quienes cobramos en pesos y tomamos más de dos colectivos al día son 5 pesos por día, 25 pesos a la semana, 100 pesos al mes, que como usuario le regalas involuntariamente a la empresa de transporte. Calcula por los miles de usuarios diarios cuanta propina se junta", continuó relatando la hija de Castellano.

Mientras sucedía ese intercambio, dos oficiales mujeres de la Policía de Entre Ríos se paran y solicitan que se frene el trayecto del colectivo. Ahí mismo llaman a la comisaría para solicitar refuerzos "pues esta mujer de 50 años y sus libros resultaban demasiada amenaza" según ironizó la hija de la denunciante. Fue allí cuando arribaron cuatro oficiales varones más de la PER e hicieron bajar a Castellano con las itacas en su mano, con el objetivo de llevarla detenida. Los oficiales eran de la Comisaría Sexta de la capital del citrus.

Según la denuncia, los oficiales "jugaron un rato con ella" y "le mostraron sus armas" con actitud intimidatoria. En ese momento, los funcionarios aseguraron que contaban con la orden de un fiscal, aunque según lo expuesto por la denunciante, nunca se comprobó tal orden. En ese marco, los policías le apretaron los brazos a la mujer para luego, al no constatar ningún delito atribuible, la dejaron "en el medio de una avenida, en una zona desolada", relató su hija. "Quienes supuestamente están para cuidarnos, te bajan del transporte cuando vas a trabajar para divertirse un rato y dejarte a la deriva", amplió.

Este martes por la mañana, la mujer se hizo presente en la fiscalía y denunció penalmente por apremios ilegales y abuso de autoridad a los oficiales que intervinieron en el irregular operativo.

Previo a esto, la mujer se dirigió a la oficial de Derechos Humanos del Municipio de Concordia. Allí fueron atendidos por Horacio Maciel, titular del área que le había prometido acompañamiento para la denuncia. "Llegamos, nos atendió una secretaria que nos tomó más datos que la Policía. Maciel, sentado atrás revisaba una agenda. No nos esperaba ningún abogado, nos dijeron que ellxs sólo prestaban asesoramiento y que si el abogado no estaba ocupado iba a asesorar pero que sino te asesora la secretaria", amplió la hija de la denunciante. Según el relato, "el asesoramiento es decirte que vayas a fiscalía y denuncies".
Fuente: ANÁLISIS