Destacan que la condena a Silvio Díaz “es la más alta que se conozca en el país”
El presidente de la Asociación Civil Luchemos por la Vida, Alberto Silveira, se mostró “gratamente sorprendido porque se haya acordado una pena tan alta” para el autor de la tragedia ocurrida frente a la Escuela Del Centenario de Paraná.
El autor de la masacre ocurrida frente a la Escuela Del Centenario de Paraná en junio pasado, Silvio Díaz, fue condenado este lunes a la pena de 8 años y 4 meses de prisión, de cumplimiento efectivo, como responsable de homicidio doloso. La pena se definió en el marco de un juicio abreviado, acordada entre la Fiscalía y la defensa del acusado.
Díaz manejaba a más de 130 kilómetros por hora por la céntrica avenida Alameda de la Federación de la capital entrerriana, estaba alcoholizado y drogado, y en esas circunstancias –minutos antes de las 8 de la mañana– atropelló y mató a un niño de 6 años que llegaba al establecimiento escolar.
La condena por ese hecho conocida este lunes recibió el rechazo de la familia de la víctima.
Sin embargo, una observación distinta es la que expresó el presidente de la Asociación Civil Luchemos por la Vida, la reconocida organización no gubernamental sin fines de lucro dedicada a la prevención de accidentes de tránsito en el país. Su titular, el abogado Alberto Silveira, sostuvo que “es la condena más alta que se conozca en el país”.
El profesional se mostró “gratamente sorprendido porque se haya acordado una pena tan alta” para el autor de la tragedia. Y señaló que en un eventual juicio oral “se hubiera podido cambiar la carátula”, de homicidio doloso a homicidio culposo, con lo que “la pena hubiera sido como máximo de 5 años”. Por lo tanto, consideró que la condena para Díaz “es ejemplar desde el punto de vista de la concientización”, que es el trabajo al que apunta la Asociación Civil Luchemos por la Vida.
“No es para nada común que se llegue a una condena por homicidio doloso por un accidente de tránsito. Me sorprendió eso y también que haya sido fruto de un acuerdo entre la fiscalía y la defensa”, afirmó Silveira sobre la sentencia conocida este lunes en Paraná, la que consideró como “la condena más alta que se conozca en el país”.
El titular de la reconocida ONG nacional indicó que “un accidente de tránsito por lo general es considerado un homicidio culposo, porque en principio no hay intención de matar, más allá de la gravísima irresponsabilidad”. En ese sentido, el profesional reiteró que “aquí se convino una pena por homicidio doloso que es superior al máximo de la pena que hubiera correspondido por homicidio culposo”. “Lo atípico es que haya sido condenado por homicidio doloso”, reiteró el especialista, y consideró que “si hubiera seguido adelante el juicio oral y público, se hubiera podido llegar a cambiar la carátula del caso, de homicidio doloso a homicidio culposo, que tiene una pena máxima de 5 años”.
El presidente de la Luchemos por la Vida afirmó que “no hay antecedentes en el país de una condena como esta, ningún caso que a nosotros nos conste”. Y relacionó la tragedia ocurrida en Paraná con los casos de Sebastián Cabello y de La Hiena Barrios, que enfrentaron situaciones similares a las de Silvio Díaz, con distintos desenlaces.
“En el caso Cabello, al imputado en primera instancia lo condenaron por homicidio con dolo eventual, a 12 años de prisión. Pero después la Cámara cambió la carátula y lo consideró un homicidio culposo, que tiene una pena máxima de 5 años, y hoy está libre”.
Silveira recordó a El Diario que “a La Hiena Barrios también lo condenaron por homicidio culposo, creo que a 3 o 4 años”.
Con esos antecedentes, Silveira consideró que la pena otorgada a Díaz en Paraná “es muy importante” y comprendió la reacción de los familiares de la víctima y la condena social a la reciente condena mediante un juicio abreviado.
“Lo que consiguieron los familiares fue mucho. Pero es propio de la psicología humana una reacción así. Nadie puede devolver la vida del que se fue, nada lo puede compensar, ni la condena más espantosa. Son pocos los casos de familiares que quedan satisfechos con la condena por un accidente de tránsito. También comprendo que haya un rechazo social, porque es un hecho muy indignante que se haya muerto un chico”, indicó el titular de Luchemos por la Vida sobre lo ocurrido en Paraná.
Silveira, por último, consideró que “para la tarea de la prevención de accidentes (a la que se dedica la asociación que él dirige) condenar a un homicida del tránsito a 8 años de prisión es, claramente, ejemplar”.
El presidente de la Asociación Civil Luchemos por la Vida, Alberto Silveira, se mostró “gratamente sorprendido porque se haya acordado una pena tan alta” para el autor de la tragedia ocurrida frente a la Escuela Del Centenario de Paraná.
El autor de la masacre ocurrida frente a la Escuela Del Centenario de Paraná en junio pasado, Silvio Díaz, fue condenado este lunes a la pena de 8 años y 4 meses de prisión, de cumplimiento efectivo, como responsable de homicidio doloso. La pena se definió en el marco de un juicio abreviado, acordada entre la Fiscalía y la defensa del acusado.
Díaz manejaba a más de 130 kilómetros por hora por la céntrica avenida Alameda de la Federación de la capital entrerriana, estaba alcoholizado y drogado, y en esas circunstancias –minutos antes de las 8 de la mañana– atropelló y mató a un niño de 6 años que llegaba al establecimiento escolar.
La condena por ese hecho conocida este lunes recibió el rechazo de la familia de la víctima.
Sin embargo, una observación distinta es la que expresó el presidente de la Asociación Civil Luchemos por la Vida, la reconocida organización no gubernamental sin fines de lucro dedicada a la prevención de accidentes de tránsito en el país. Su titular, el abogado Alberto Silveira, sostuvo que “es la condena más alta que se conozca en el país”.
El profesional se mostró “gratamente sorprendido porque se haya acordado una pena tan alta” para el autor de la tragedia. Y señaló que en un eventual juicio oral “se hubiera podido cambiar la carátula”, de homicidio doloso a homicidio culposo, con lo que “la pena hubiera sido como máximo de 5 años”. Por lo tanto, consideró que la condena para Díaz “es ejemplar desde el punto de vista de la concientización”, que es el trabajo al que apunta la Asociación Civil Luchemos por la Vida.
“No es para nada común que se llegue a una condena por homicidio doloso por un accidente de tránsito. Me sorprendió eso y también que haya sido fruto de un acuerdo entre la fiscalía y la defensa”, afirmó Silveira sobre la sentencia conocida este lunes en Paraná, la que consideró como “la condena más alta que se conozca en el país”.
El titular de la reconocida ONG nacional indicó que “un accidente de tránsito por lo general es considerado un homicidio culposo, porque en principio no hay intención de matar, más allá de la gravísima irresponsabilidad”. En ese sentido, el profesional reiteró que “aquí se convino una pena por homicidio doloso que es superior al máximo de la pena que hubiera correspondido por homicidio culposo”. “Lo atípico es que haya sido condenado por homicidio doloso”, reiteró el especialista, y consideró que “si hubiera seguido adelante el juicio oral y público, se hubiera podido llegar a cambiar la carátula del caso, de homicidio doloso a homicidio culposo, que tiene una pena máxima de 5 años”.
El presidente de la Luchemos por la Vida afirmó que “no hay antecedentes en el país de una condena como esta, ningún caso que a nosotros nos conste”. Y relacionó la tragedia ocurrida en Paraná con los casos de Sebastián Cabello y de La Hiena Barrios, que enfrentaron situaciones similares a las de Silvio Díaz, con distintos desenlaces.
“En el caso Cabello, al imputado en primera instancia lo condenaron por homicidio con dolo eventual, a 12 años de prisión. Pero después la Cámara cambió la carátula y lo consideró un homicidio culposo, que tiene una pena máxima de 5 años, y hoy está libre”.
Silveira recordó a El Diario que “a La Hiena Barrios también lo condenaron por homicidio culposo, creo que a 3 o 4 años”.
Con esos antecedentes, Silveira consideró que la pena otorgada a Díaz en Paraná “es muy importante” y comprendió la reacción de los familiares de la víctima y la condena social a la reciente condena mediante un juicio abreviado.
“Lo que consiguieron los familiares fue mucho. Pero es propio de la psicología humana una reacción así. Nadie puede devolver la vida del que se fue, nada lo puede compensar, ni la condena más espantosa. Son pocos los casos de familiares que quedan satisfechos con la condena por un accidente de tránsito. También comprendo que haya un rechazo social, porque es un hecho muy indignante que se haya muerto un chico”, indicó el titular de Luchemos por la Vida sobre lo ocurrido en Paraná.
Silveira, por último, consideró que “para la tarea de la prevención de accidentes (a la que se dedica la asociación que él dirige) condenar a un homicida del tránsito a 8 años de prisión es, claramente, ejemplar”.