"Si logramos que se instale una nueva empresa de dimensiones importantes, son dos o tres puntos (porcentuales) que se agregarían al PIB", aseguró Mujica. "Además nos ahorraremos cientos de camiones cargados de madera lidiando por las carreteras y se podrá agregar valor a la venta de esa producción forestal", acotó.
La nueva planta, de construirse, podrá producir más de un millón de toneladas anuales, al igual que las dos fábricas ya existentes. Pero la inversión debe ser analizada con cuidado porque cada año se inaugura una fábrica de ese porte en el mundo, lo que incrementa la oferta de celulosa.
Es que el sector forestal, que despegó con los incentivos que le dio la ley de 1987, tiene todavía margen para crecer y por lo tanto Uruguay puede tener una planta de celulosa más o quizás dos. Atilio Ligrone, gerente de la Sociedad de Productores Forestales, explicó a El País que cada año se incrementa la cobertura forestal y que en los últimos tres años se plantaron 20.000 hectáreas anuales con materiales genéticamente mejorados. A su vez, se han reforestado otras 20.000 hectáreas cada año, con material genéticamente mejorado. Estas dos tendencias permitirán incrementar la disponibilidad de madera en el futuro. Hay más área dedicada a bosques y, al mismo tiempo, más productividad. Y recién se han forestado el 25% de los suelos declarados de prioridad forestal, explicó Ligrone.
La forestación ha logrado, en buena medida, convivir con la ganadería. De hecho, el 60% de las plantaciones se han realizado en predios de productores agropecuarios que se asocian con empresas forestales, explicó Ligrone.
El monto de las exportaciones forestales por todo concepto en 2014 será mayor que el registrado en años anteriores. El porcentaje de incremento de las exportaciones dependerá en buena medida del precio promedio de la celulosa, que es un fuerte componente de las exportaciones totales y que, cabe esperar, con Montes del Plata tendrá un salto. En cuanto a la exportación de productos aserrados y tableros, se recupera lentamente de los efectos de la recesión en Estados Unidos y Europa.
Ante la posibilidad de que se instale una nueva planta de celulosa, Ligrone cree que sería importante que estuviera en el centro o norte del país porque son dos regiones forestales que en los últimos años han incrementado sus plantaciones. De hecho, esta zona concentra el 46% de los bosques artificiales del país, fundamentalmente compuestos por Eucalyptus grandis, de acuerdo con Uruguay XXI.
Boom
La pasta de celulosa es el principal motor de las exportaciones del sector forestal. Es el insumo más importante para producir papeles y cartones y las dos plantas uruguayas son muy grandes, incluso para los estándares mundiales. Las exportaciones de celulosa rondaron los US$ 604 millones en 2013 y representaron el 6% de las ventas totales de Uruguay al exterior ese año. Las ventas del sector forestal en su conjunto se ubicaron en casi US$ 1.000 millones y rondaron el 10% de las exportaciones totales del país. El salto del sector con Montes del Plata se espera que sea notable. La planta se inaugura bastante más tarde de lo previsto originalmente, pero aún así podría llegar a producir 500.000 toneladas en lo que queda del año. Las ventas del sector forestal saltarán 4 puntos, hasta llegar a ser el 14% de todo lo que vende el país. Y eso en un contexto en el que se espera que el precio de la celulosa de fibra corta, producida en Uruguay, caiga un poco porque declinará algo la demanda china. Montes del Plata en Conchillas sumará 1,3 millones de toneladas a la misma cantidad que a partir de este año produce UPM y dos puntos al Producto Interno Bruto.