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Pasa la ambulancia

El Frente Renovador avanza en acuerdos políticos con dirigentes que pelearán la gobernación en al menos cinco provincias. Muchos de ellos son los radicales molestos con las peleas internas del Frente Unen y la novela Pino-Carrió.

El Frente Renovador de Sergio Massa se movió rápido para sacar provecho de la crisis en Unen. Molestos con la novela Pino-Carrió, algunos dirigentes radicales se cansaron de las internas y aceleraron las negociaciones para cerrar un entendimiento con el ex intendente de Tigre de cara al 2015. 

La estrategia implica el armado de fórmulas conjuntas que competirán con chances en al menos cinco provincias. El Frente Renovador se aseguraría nombres propios como candidatos a vice y, lo más importante, una boleta conjunta que posiblemente lleve a Massa como postulante a Presidente. 

Massa ganó las elecciones de 2013 en la provincia de Buenos Aires y es uno de los principales aspirantes a la Casa Rosada para 2015 de acuerdo a lo que indican las principales encuestadoras. Hasta ahora el ex intendente de Tigre se mostró preocupado por armar equipos técnicos con propuestas para los temas más calientes de la agenda nacional pero aún no confirmó si finalmente irá por la Presidencia. 

Mientras llegan los tiempos de definiciones políticas, Massa y sus aliados realizan recorridas por el interior del país y avanzan las conversaciones con referentes de distintas provincias. El Frente Renovador es un partido nuevo y necesita instalarse en el interior del país para sumar chances para el próximo año. 

Esas conversaciones arrojaron coincidencias con los radicales José Manuel Cano (Tucumán), Eduardo Costa (Santa Cruz), Julio Martínez (La Rioja), Federico Sciurano (Tierra del Fuego), Ricardo Buryaile (Formosa) y Horacio Pechi Quiroga (Neuquén). 

Estos posibles acuerdos se suman al inminente traspaso de Martín Insaurralde. El diputado kirchnerista le anunciará en los próximos días a Daniel Scioli que en 2015 competirá con la boleta negra, amarilla y roja del Frente Renovador. El ex intendente de Lomas de Zamora pretende pelear por la Gobernación y las encuestas le dan la razón. Sus apariciones en ShowMatch y el piso de votos que consiguió el año pasado ya lo perfilaron como uno de los postulantes con mayores chances para quedarse con el distrito. 

Claro está que el Frente para la Victoria no le dejará el camino libre. El diputado Carlos Kunkel avanza con un proyecto legislativo para evitar los dobles mandatos y obligar a Insaurralde -de licencia en Lomas- a renunciar a su banca. También se esperan otro tipo de piedras en el camino. 


Con Insaurralde fuera de la cancha, Scioli empezó a "levantar" la figura del intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, como un posible candidato a la Gobernación. Quien ya está lanzado en territorio bonaerense es Diego Bossio, que cerró filas con Florencio Randazzo. El ministro del Interior de Transporte está convencido de que puede ganarle las internas a Scioli y no hay encuesta que lo haga pensar en la posibilidad de bajarse a la Provincia. Al menos por ahora.