El director nacional de Vivienda Social de la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación, Ramiro Masjuan, junto al presidente del Instituto Autárquico de Planeamiento y Vivienda de Entre Ríos, Marcelo Casaretto, dejaron inauguradas ayer por la tarde 86 nuevas viviendas e infraestructura en Concepción del Uruguay. Las mismas forman parte de un conjunto de 250 viviendas en total, para las cuales el Gobierno Nacional invirtió alrededor de 187 millones de pesos para beneficiar a más de mil entrerrianos.
“Nos alegra enormemente poder entregar viviendas en esta época, ya que las familias adjudicatarias tienen la posibilidad de arrancar un año nuevo en su casa propia, la que se convertirá en su hogar”, manifestó Masjuan durante el acto de entrega de llaves a los flamantes beneficiarios, el cual se desarrolló en el propio barrio, que ya cuenta con otras 40 casas habitadas.
“Cada día que avanzamos en entregar viviendas estamos reduciendo el déficit habitacional y así estamos contribuyendo de alguna manera al gran objetivo que tiene el Presidente Macri de reducir la pobreza”, agregó el funcionario.
“Cada día que avanzamos en entregar viviendas estamos reduciendo el déficit habitacional y así estamos contribuyendo de alguna manera al gran objetivo que tiene el Presidente Macri de reducir la pobreza”, agregó el funcionario.
Las viviendas, de 55 mts2 de superficie cubierta, tienen dos dormitorios, cocina, estar-comedor y baño completo. Instalaciones sanitarias de agua fría y caliente, gas envasado y conexión a la red cloacal de la ciudad.
“Esto me queda para toda la vida”
Rocío Villagra se anotó hace nueve años en el registro del Instituto Autárquico de Planeamiento y Vivienda de Entre Ríos. Su marido es camionero y tiene dos hijos -un nene de 10 años y una nena de dos- con epidermólisis ampollar, una enfermedad similar a la “piel de cristal”, que les genera constantemente ampollas en su cuerpo al menor roce de la piel.
Esperó pacientemente y ahora podrá finalmente tener su casa propia y un lugar más amplio para criar a sus hijos. “El más grande por fin va a poder tener su habitación para él solo, tal como deseaba. Antes vivíamos con mi mamá. Un poco la voy a extrañar, pero ahora esto es mío y de mis chicos, que era lo que yo más quería. Estoy muy contenta”, expresa Rocío visiblemente ansiosa por la mudanza.