Es el hijastro de Sebastián Wagner, condenado a prisión perpetua por la violación y el asesinato de la chica de 21 años.
"A mí me acusó la fiscalía, de ahí vino mi detención. Siempre estuve confiado. Pero se pudo comprobar mi inocencia. Estoy agradecido", dijo Gabriel Otero, quien fue absuelto y está libre "de culpa y cargo" tras el veredicto de este martes por el crimen de Micaela García.
El liberado, de 21 años, se abrazó con Néstor García, padre de la estudiante de Educación Física que tenía la misma edad que Otero cuando fue secuestrada, violada y asesinada en Gualeguay, el 1° de abril.
Otero es el hijastro de Sebastián Wagner, condenado a prisión perpetua por ese femicidio.
"El padre me pidió perdón por lo que pasó. Fueron 6 meses de encierro. Porque a pesar de no estar en la cárcel estuve con [prisión] domiciliaria. Wagner no era mi padrastro, era pareja de mi mamá. Mi papá está vivo", cerró el liberado.
Su madre es Nora González, quien siempre defendió la inocencia de su hijo. No así la de su ex pareja.
Con un fuerte abrazo a su pequeña hija, Otero se retiró por sus propios medios del Tribunal Oral 2 de Juicio y Apelaciones de Gualeguay, donde el 21 de septiembre se inició el juicio.
"No es lo que esperábamos. No estamos conformes. Queríamos otras penas", dijo por su parte la madre de Micaela. "A mi hija nadie me la va a traer."
La familia no cuestiona la absolución de Otero pero no está de acuerdo con la pena a Néstor Pavón: 5 años de prisión por encubrimiento agravado.
"El derecho lo asiste a no estar. Y él tomó esa opción", dijo García sobre la ausencia de Wagner durante la sentencia.