17/1/2017 👇
Salud es el área más jaqueada por el recorte de programas nacionales.
Hay merma del 30% en el envío de medicación e insumos, que afecta tanto al programa de salud sexual y reproductiva –no llegan anticonceptivos—como al dispositivo de distribución de botiquines con medicamentos.
Salud es el área más jaqueada por el recorte de programas nacionales.
En los últimos días, se conoció que la Provincia debió salir a comprar con recursos propios una partida de 150 mil preservativos para el Programa de Salud Sexual y Reproductiva, y que se distribuyen a trav s de hospitales y centros de salud. Esos insumos antes venían desde Nación. Pero ahora no.
NO ES EL ÚNICO INSUMO CRÍTICO
No llega medicación, y entre esas faltantes están los anticonconceptivos, orales e inyectables, como el mesygina, de aplicación mensual entre las mujeres empadronadas en el programa provincial de salud reproductiva. Pero también el faltante se observa en las partidas de leche fortificada, hormonas para la población LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y trans) y la insulina para diabéticos.
No llega medicación, y entre esas faltantes están los anticonconceptivos, orales e inyectables, como el mesygina, de aplicación mensual entre las mujeres empadronadas en el programa provincial de salud reproductiva. Pero también el faltante se observa en las partidas de leche fortificada, hormonas para la población LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y trans) y la insulina para diabéticos.
También los problemas alcanzan al Programa Provincial VIH Sida, donde escasean los insumos y la medicación. La falta de los reactivos para carga viral y CD4 viene acentuándose, y por eso desde Entre Ríos se deben enviar muestras para confirmación a la provincia de Córdoba.
Recorte del 30%. La situación afecta a todo el país, sin embargo, y no sólo a Entre Ríos.
Esteban Paulón, subsecretario de Políticas de Diversidad Sexual del Gobierno de Santa Fe, alertó por la falta de medicación del programa de Sida, lo que podría derivar en la interrupción de los tratamientos.
“Esperamos que nadie tenga que interrumpir su tratamiento, como también que se regularice la entrega y distribución”.
La interrupción de los tratamientos atenta contra la estabilidad del paciente, ya que buena parte de su éxito depende de que se le pueda dar continuidad. “Debe haber algunos resortes de emergencia sanitaria para ir comprando en el ‘mientras tanto’, hasta que se resuelvan las licitaciones”, indicó Paulón. “Se supone que la nueva licitación se hizo entre septiembre y octubre, por lo que se debería estar adjudicando y entregando los medicamentos en breve”, estimó.
“La provincia de Entre Ríos no recepcionó medicamentos para sustentar los programas”, alertó Sonia Velázquez, responsable de la Unidad de Gestión de Programas de Salud en la provincia.
Al respecto, señaló que los programas nacionales sanitarios “sufrieron recortes desde principios de 2016”, y que durante el año último los planes asistenciales se sostuvieron con los insumos adquiridos por medio de licitaciones hechas a lo largo de 2015. Y apuntó que durante el año pasado muchas licitaciones se “cayeron” por falta de recursos que no llegaban desde la administración nacional.
“Desde los paradigmas de los derechos y la inclusión, se buscó ir garantizando la provisión de insumos y medicamentos ante la incertidumbre y el recorte de envío de insumos básicos de los programas nacionales –explicó--. Primero, fue la provisión de leche para el Programa de Fortalecimiento Nutricional de la Dirección de Maternidad e Infancia; luego, atendimos el Programa Remediar, por cuanto se discontinuaron los principales insumos (como el enalapril) en la provisión mensual. La reducción fue del orden del 30%”.
La reducción del aporte nacional se extendió a otros programas. “También hubo interrupción en la provisión de hormonas para el colectivo LGBT; lo mismo en insulinas, y ahora, durante enero, la no provisión de los insumos para el programa de salud sexual y reproductiva. Ninguna provincia estaba preparada para discontinuar la provisión de insumos, luego de diez años ininterrumpidos de los programas. Ante esta situación, la provincia debió hacer frente con rentas generales para llevar adelante las licitaciones”, apuntó.
SIN MEDICACIÓN
Uno de los programas sensibles, el Plan Remediar, ahora bautizado Cobertura Universal de Salud (CUS), soportó una poda considerable.
Uno de los programas sensibles, el Plan Remediar, ahora bautizado Cobertura Universal de Salud (CUS), soportó una poda considerable.
Y ante la escasez, la provincia debió recurrir a partidas extra para la compra con recursos propios por cuanto no había ninguna compra prevista. “La provincia debió reforzar a los centros de salud provinciales, con un 40% extra de partidas presupuestarias y los centros de salud utilizaron los fondos del programa Sumar para adquirir medicación. Por ejemplo en los botiquines que llegan del exprograma Remediar no llegaron los anticonceptivos. Llegarán dentro de dos meses, según nos informaron”, relató la funcionaria.
Mientras, el denominado Plan Qunita está en una situación de falta de definiciones. En septiembre último se suspendió su entrega tras una resolución del juez federal Claudio Bonadío, en una causa en la que está investigado el exjefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Desde entonces, el destino del kit Qunita está sin resolverse. En la provincia, hay kits de ese programa al aguardo de una resolución del Ministerio de Salud de la Nación. “Estamos esperando que se resuelva qué hacer”, indicó Velázquez.
En Entre Ríos el recorte de los programas nacionales de salud tiene un serio impacto sobre el sistema sanitario público.
La afectación alcanza a más de 300 centros de salud de jurisdicción provincial y municipal y 46 hospitales públicos, y a un universo de 308 mil personas sin cobertura de salud.
Publicó: El Diario
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