El exgobernador Sergio Urribarri volvió a tener visibilidad en las redes sociales, y desde el domingo reactivó su cuenta de Facebook, donde había posteado por última vez el 21 de abril, una inactividad que contrastaba con su alta exposición durante su gestión al frente del Ejecutivo provincial.
Lo primero que publicó fue una aclaración por su prolongado ostracismo y dijo que después de varios meses “de dejar correr el agua bajo el puente vuelvo a conectar con ustedes para conversar, para cambiar ideas e impresiones, para contenernos mutuamente, para inspirarnos, para tratar de esclarecernos en estos momentos especiales del país en los que debe primar la lucidez y amor a la patria”.
“Les cuento que actualicé mi portada porque soy un dirigente que, además de la política, tiene una vida de verdad, en donde los afectos, los hijos, los nietos, la historia, los amigos son muy importantes y quería reflejarlo”, descubrió Urribarri.
Y agregó: “No estoy retirado, y tampoco estoy en campaña; pero sigo comprometido en el servicio a la provincia, colaborando en todo lo necesario con mi amigo y gobernador Gustavo Bordet y al lado de todos los entrerrianos”.
Un segundo posteo lo dedicó a las denuncias que pesan en su contra en la Justicia, por enriquecimiento ilícito, y que involucra a toda su familia, incluido su hijo, el actual ministro de Gobierno, Mauro Urribarri. Pero no es la única: también lo investigan por negociaciones incompatibles con la función pública por las tramitaciones exprés que hubo durante la Cumbre de Presidentes del Mercosur, en diciembre de 2014.
“Lo de agua debajo del puente es porque yo también he sido atacado judicialmente con una denuncia infundada de la que me estoy defendiendo sin involucrar ni molestar ni al peronismo ni a la militancia y eso lleva un poco de tiempo, amarguras y energía”, escribió Urribarri.
“Recuerdo a los compañeros que a nivel nacional perdimos las elecciones, por lo que si alguna vez por la vía democrática –la única en la participaría- los peronistas queremos recuperar el gobierno nacional, si queremos retener la provincia, tenemos que ser cada vez más y no cada vez menos. Esto, los que son peronistas lo entenderán con claridad; los que no, no”, agregó.
“Es muy lindo para mi sentir la estima de los miles y miles de entrerrianos a los que hemos llegado con nuestra gestión –se envalentonó–. A los que manifiestan su odio espero que no les transmitan ese feo sentimiento a sus hijos. A los que se muestran intransigentes, reflexión. Los saludo y nos seguimos viendo. Más tarde responderé algunos comentarios que sean conducentes a estas ideas y a esta actitud positiva”.
De ese modo, con un tono componedor de pastor evangelista, Urribarri hizo su reaparición en las redes sociales.
Aunque será la Justicia la que defina su suerte.
Aunque será la Justicia la que defina su suerte.